La cirugía de orejas u otoplastia permite corregir las orejas que se encuentran de despegadas en mayor o menor medida de la cabeza, comúnmente conocidas como orejas de soplillo, las orejas prominentes, en copa o que presenten un traumatismo. Esta intervención, aunque suele realizarse en niños hasta los 14 años y de forma más frecuente entre los 7 y 8 años de edad, por tener el cartílago más maleable, se puede realizar con éxito también en edad adulta. De hecho, no son pocas las personas que acuden a la consulta para solucionar esta característica anatómica que desde la niñez o adolescencia afecta de alguna manera a su autoestima. El Earfold, por otra parte, es un implante de titanio y níquel revestido de oro 24 quilates que se coloca en el antihélix con unos ganchillos pequeños que se ajustan y doblan la oreja hacia atrás para corregir las orejas de soplilo. Para poder evaluar ambos tratamientos veremos en que se asemejan y diferencian: Abordaje Con la otoplastia, el cirujano plástico realiza una incisión en la unión de la parte posterior de la oreja con la cabeza, aprovechando el pliegue natural existente. Una vez realizada esta incisión, el tratamiento permite remodelar, reseccionar, limar o suturar las distintas partes de la oreja para conseguir la forma idónea, llegando incluso a extirpar parte de la concha y el exceso de piel. También podemos llevar a cabo de forma conjunta una lobuloplastia para obtener mayor armonía. Es decir, que con la cirugía de orejas podemos cambiar la forma, el tamaño, la orientación y la disposición de las orejas, además de corregir la separación de éstas con la cabeza. El implante earfold en cambio, sólo permite corregir los casos de orejas de soplillo llevando el hélix hacia atrás para pegar o mover la oreja hacia la cabeza, recreando el antihélix cuando éste se haya aplanado. No está indicado en todos los casos que se pretenda corregir las orejas separadas. Aquellos en que están separadas por la parte superior de pabellón auricular, son los más indicados. El cirujano plástico evaluará si el paciente es un buen candidato. Se puede realizar en adultos y niños a partir de los 7 años. Consta de 2 fases, en la primera fase o prefold se coloca un dispositivo de prueba para evaluar si es eficaz en el caso particular del paciente y de ser así se procede a la intervención. Es un procedimiento reversible pero si se retira el implante, se pierden los efectos.
Postoperatorio
Resultados
Apariencia
Comodidad
Suele ser similar, aunque depende de cuantos implantes se requieran en cada caso en particular. Si desea ponerse en contacto con el Dr. Díaz Infante y su equipo en nuestro Centro de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética en Madrid, puede hacerlo a través de nuestro formulario de contacto o bien por teléfono en el +34 915 781 421. Estaremos encantados de atenderle y asesorarle. Los comentarios están cerrados.
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